El champán
-Hamilton lo tiene medio hecho. Dominador absoluto con 'grand chelem' incluido. Incrementa su ventaja en la general y no transmite ningún punto débil.
-Force India aprovechó su motor. Sus dos pilotos terminaron en los puntos, adelantando a Lotus como quinto clasificado en el mundial de marcas. Cada vez se muestran más consistentes.
-Ericsson progresa adecuadamente. El sueco puntuó en Monza por tercera carrera consecutiva, recuperándose de su nefasta primera mitad de campeonato. Volvió a superar a su compañero Nasr, que no termina entre los diez primeros desde Mónaco.
El pinchazo
-Rosberg, en la cuerda floja. Nueva decepción del germano, que no demuestra ambición ni en los sábados ni en la salida. Su retirada fue por avería, pero estaba a un mundo de Hamilton. Si quiere tener opciones de proclamarse campeón debe reaccionar en Singapur.
-La Fórmula 1 está en franco declive. Los monoplazas son lentos, el ganador ya se sabe antes de que los pilotos se bajen del avión y la FIA protagoniza un ridículo detrás de otro. Ayer hubo que esperar dos horas después de la carrera para confirmar la victoria de Hamilton en los despachos.
-Renault, un motor pésimo. Las roturas condenaron a Red Bull y Toro Rosso a partir desde el fondo de la parrilla. Visto lo visto, la escudería austríaca se está planteando montar Ferrari en sus coches para el próximo curso.
-La Fórmula 1 está en franco declive. Los monoplazas son lentos, el ganador ya se sabe antes de que los pilotos se bajen del avión y la FIA protagoniza un ridículo detrás de otro. Ayer hubo que esperar dos horas después de la carrera para confirmar la victoria de Hamilton en los despachos.
-Renault, un motor pésimo. Las roturas condenaron a Red Bull y Toro Rosso a partir desde el fondo de la parrilla. Visto lo visto, la escudería austríaca se está planteando montar Ferrari en sus coches para el próximo curso.
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