Ya están aquí los galardones más esperados del año, aquellos que premian a las investigaciones científicas serias más esperpénticas. Así podemos formarnos una idea de hacia dónde va encaminado nuestro progreso como civilización.
Demostración practica de cómo caminan los dinosaurios... o los pollos con un palo en la cola. |
Los triunfadores de la 25ª edición de los Premios Ig Nobel son:
QUÍMICA: a unos investigadores australianos y estadounidenses por inventar una receta para 'descocer' parcialmente un huevo cocido.
FÍSICA: a Patricia Yang, David Hu, Jonathan Pham y Jermoe Choo por comprobar el principio biológico de que casi todos los mamíferos vacían sus vejigas en 21 segundos (con un margen de 13 segundos más o menos).
LITERATURA: a Mark Dingemanse, Francisco Torreira y Nick J. Enfield por descubrir que la expresión "¿eh?" o sus equivalentes existe en todos los lenguajes humanos, y por no estar muy seguros de por qué.
DIRECCIÓN Y GESTIÓN EMPRESARIAL: a Gennaro Bernile, Vineet Bhagwat y P. Raghavendra Rau por descubrir que muchos de los ejecutivos que sufrieron desastres naturales en su infancia son más propensos a tomar decisiones arriesgadas en su trabajo.
ECONOMÍA: a la Policía Metropolitana de Bangkok por ofrecer dinero extra a sus agentes si éstos rechazaban recibir sobornos.
MEDICINA: a unos investigadores que estudiaron las consecuencias y los beneficios biomédicos de los besos apasionados ("y otras actividades íntimas interpersonales").
MATEMÁTICAS: a Elisabeth Oberzaucher y Karl Grammer por intentar aplicar técnicas matemáticas para determinar cómo fue posible que el sultán marroquí Ismaíl engendrara 888 niños entre 1697 y 1727.
BIOLOGÍA: a unos científicos chilenos por osbervar que las gallinas caminan de un modo muy similar a los dinosaurios si les atamos un palo en la cola.
DIAGNÓSTICO MÉDICO: a unos científicos por determinar que los badenes de las carreteras pueden resultar útiles para diagnosticar una apendicitis aguda cuando un conductor pasa sobre ellos demasiado rápido.
FISIOLOGÍA Y ENTOMOLOGÍA: premio compartido entre Justin Schmidt, autor de un ránking de zonas corporales según la cantidad de dolor provocada por picaduras de insectos, y Michael L. Smith, por aplicarse repetidamente picaduras de avispas en 25 diferentes partes del cuerpo para averiguar cuáles son las menos dolorosas (el cráneo, la punta del dedo medio del pie, la parte superior del brazo) y cuáles las más sensibles (las aletas de la nariz, el labio superior, el tallo del pene).
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