Descubriendo la Navidad

Pesadilla antes de Navidad

Hay películas en las que el tiempo no hace la menor mella y que invitan a ser vistas de vez en cuando. Pesadilla antes de Navidad (1993), de Henry Selick (Los mundos de Coraline, James y el melocotón gigante), es una de ellas. No sólo dista de ser una pesadilla, sino que por el contrario constituye un sueño maravilloso lleno de fantasía.

Jack Skellington es el mejor preparando las más terroríficas fiestas de Halloween. No en vano, es el Señor de la Ciudad de Halloween, lugar habitado por los monstruos que pueblan las pesadillas de los niños. Un poco cansado de hacer siempre lo mismo, Jack se queda fascinado cuando por accidente conoce la Navidad. Tanto es así que decide organizarla él para todo el mundo, para lo que tendrá que suplantar al mismísimo Santa Claus.

Jack quiere ser el rey de la Navidad.

Si bien la dirección recayó en manos de Selick, el papel de Tim Burton en Pesadilla antes de Navidad fue fundamental. Productor y autor de la idea sobre la que se cimenta el proyecto, Burton construyó un original cuento navideño deliciosamente macabro protagonizado por un esqueleto, una muñeca de trapo, el hombre del saco, Papá Noel y un perro fantasma.

La historia es atractiva, está bien llevada y transcurre de forma ágil a lo largo de hora y cuarto de metraje. Nada sobra y la sensación de satisfacción es plena pese a la reducida duración. Los principales cimientos sobre los que se asienta el filme, eso sí, son una animación artesana espectacular y una música extraordinaria.

Monstruos de pesadilla intentarán celebrar la Navidad.

La técnica del 'stop-motion' se aplica con maestría sobre unos personajes y unos decorados con un diseño único e icónico. La maravilla visual que ofrece Pesadilla antes de Navidad irradia magia sin tregua. Todas y cada una de sus escenas son dignas de elogio y rebosantes de atractivo.

La banda sonora de Danny Elfman es la segunda joya que engalana a la cinta de Selick. La partitura asume el protagonismo en numerosas ocasiones, conformando un carrusel de escenas musicales memorables. Un vibrante arranque en el que se nos presenta la Ciudad de Halloween o una alborozada secuencia en la que Jack se topa de bruces con la felicidad son algunos ejemplos.

Resulta difícil decidir si la película va dirigida a los niños o a los mayores. Ambos disfrutarán, pero cada grupo a su manera. Se trata de un cine relativamente maduro que aborda sentimientos como la soledad o la búsqueda de nuevas metas. Pese a su carácter tétrico y su atmósfera tenebrosa, encaja perfectamente con eso que se ha dado en llamar espíritu navideño.

Tremendamente complicado encontrarle fallos a esta inolvidable fábula para la que no pasan los años. Un clásico en toda regla apto para todas las edades y con una banda sonora excelente.

Puntuación: 9,5

T.O.: The Nightmare Before Christmas / EE.UU. / 1993 / Dirección: Henry Selick / Elenco: Animación / Género: Fantástico / Duración: 75 minutos