F1: GP de Brasil 2012

La temporada ha finalizado con la consagración de Sebastian Vettel como tricampeón tras su espectacular remontada de la última a la sexta posición con un coche dañado. Ya haré una evaluación de toda la temporada (ahora que sabemos que la FIA no actuará de oficio), así que centrémonos ahora en la última prueba de 2012. 

Hamilton peleando por la victoria y abandonando, Räikkönen perdido por las escapatorias en un Lotus sin ritmo,  Bruno Senna en plan kamikaze, los Toro Rosso y Schumacher con una actitud servil y vergonzosa, Petrov cruzando la meta en 11ª lugar y consiguiendo el décimo puesto para su equipo... 

Schumacher, cediéndole el testigo a Vettel tras retirarse definitivamente
de la F1.

En el circuito de Interlagos vimos muchas cosas, pero los chinches de mis barbas apuntan a cuatro protagonistas:

EL AZAFRÁN: Jenson Button. En condiciones cambiantes, Button siempre se impone. Acertó en la estrategia y aprovechó la colisión de Hamilton y Hulkenberg para cosechar la tercera victoria de la temporada. Fantástica manera de despedir una temporada en la que ha estado a la sombra de su compañero.
LA PIÑA COLADA: Felipe Massa. Otra carrera excelente del brasileño. Superó a Alonso tanto el sábado como el domingo. Fue un perfecto escudero al cederle su posición al español y resistir las embestidas de sus perseguidores. Ferrari finalmente materializó el subcampeonato de marcas.
EL TÁPERGÜER: Nico Hulkenberg. El joven talento alemán suele destacar en condiciones de lluvia, y en Interlagos peleó por la victoria hasta el incidente con Hamilton. Le falta experiencia todavía, pero su contratación por Sauber puede ser el trampolín a una escudería grande.
EL ÑORDO: Paul di Resta. Cuando un piloto destaca, la comparación con su compañero es tan inevitable como dura. Di Resta estuvo lejos del ritmo de su compañero y se estampó contra las protecciones a poco de terminar la prueba. Aunque es lo esperado, no tiene el puesto garantizado en Force India.