Hermanos, en estos ajetreados días he recibido varias noticias malignas. En primer lugar, que Takuma Sato, ídolo donde los haya, ha terminado su primera temporada en la Indy Car con unos resultados no demasiado entusiastas. El gran Shinichi nos resume las andanzas del mejor piloto de F1 de la historia:
La segunda mala nueva, que es infinitamente peor que la primera, es la lesión del Expreso de Lisboa, Miguel Brito. Desgraciadamente para todos los aficionados del arte, el mayor exponente de la elegancia sobre el césped estará un tiempo reposando y planeando nuevas actuaciones estelares.
No quisiera dejar este post huérfano de grandes frases de Niche. Ahí van dos desconcertantes píldoras de su sabiduría:
-Hay en el mundo mucha mierda: ¡eso es verdad! ¡Mas no por ello es ya el mundo un mostruo merdoso!
-¡Oh hermanos míos, hay mucha sabiduría en el hecho de que exista mucha mierda en el mundo!
¿A qué se refería exactamente con "mierda"? Pues prefiero no revelarlo. Desvelar el significado de las majaderías de un loco es una barbarie que no voy a cometer hoy.
Afortunadamente, no todo son dramas en este mundo. Eduardo Mendoza, uno de los escritores predilectos en la Caverna, ha sido honrado con la entrega del Premio Planeta. Brindemos a su salud.
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