jueves, 24 de septiembre de 2009

Descartes está descartado

Hermanos, hoy dedicaré mi bitácora a uno de los farsantes más estafadores de la patética Historia de la Humanidad (obviamente, las mayúsculas son pura ironía). René Descartes.
Descartes nació hace ochorropotrocientos años, como resultado de mezclar lentejas con mierda. De ahí que presentara esa cara de estreñido toda su vida:



Tras varios años (unos cuarenta) de permanencia en una de las guarderías más sucias y destartaladas de toda Francia, nuestro querido René decidió que ya era hora de dejar de llevar pañales, y comenzó a ver mundo. Desgraciadamente, el trayecto más largo que realizó en su vida fue el de dar la vuelta a su manzana huyendo de una pandilla de cactus furiosos que le querían propinar una buena paliza.

Un tiempo más tarde, Descartes consiguió rellenar las páginas de un libro con auténticas majaderías, que sorpendentemente se convirtió en un Best-Seller. Aunque René adujo que el éxito de ventas se debió a la excelencia de su contenido filosófico, lo cierto es que gracias a una reciente investigación se descubrió que Descartes se gastó todo su dinero comprando botellas de vino, que él vendía a bajo precio acompañadas de ejemplares de su obra. Esto es, por cada botella de vino que se comprara, se adquiría gratuitamente una copia de su Método.



Así las cosas, pasó muchísimo tiempo hasta que alguien se dignó a leer esa puta basura de libro. Hasta entonces los borrachos lo utilizaban para liar cigarrillos, o simplemente se limpiaban el culo con él. Un detallado análisis de El discurso del Método nos permite deducir que toda la filosofía de este supuesto filósofo francés se apoya únicamente en su célebre enunciado "Pienso, luego existo", originalmente recitado como "Pienso, luego estafo" y modificado a posteriori para añadir un toque intelectual a la obra.

Ahora bien, si esta frase resultara no ser totalmente cierta y evidente, sino dudosa aunque sólo fuese un poco, René debería haberla rechazado mediante lo que él llamaba "duda metódica". Ea pues, si encontramos un asomo de duda en la afirmación "Pienso, luego existo" demostraremos cuán farsante, cuán bellaco era este apestoso filósofo.

Allá voy. Imaginemos que todo cuanto existe, incluyéndonos a nosotros, es fruto de la imaginación de otro ser. Dicho de otra forma, que todo cuanto nos sucede en la vida es un invento de alguien, que no existimos realmente. Realmente, no podemos estar seguros de que no seamos un mero artificio creado por algún ente superior que sea capaz de imaginar algo tan complejo. Por tanto, la filosofía de nuestro querido Descartes se va al carajo.

Existen algunos indicios de esta hipótesis que aquí planteo, y que, si nos fijamos bien, podrían servir para dudar de nuestra propia existencia. Por ejemplo, cada uno de nosotros sólo puede saber lo que piensa él, y ver lo que sólo ve él, y oír lo que sólo oye él, etc. Es decir, que no podemos estar seguros de que una persona a la que dejemos de ver, escuchar, oler... de pronto desaparezca. En consecuencia, podríamos llegar a la conclusión de que nosotros somos el protagonista de la invención de ese ser superior de tan gran capacidad mental que ya mencioné en el párrafo superior.

Por otro lado, deberíamos pensar en el sueño, en la inconsciencia. Cuando uno despierta no recuerda nada de lo sucedido durante su reposo. Esto es porque, según mi teoría, no existimos sino en la mente de ese ser superior. El hecho de que no recordemos nada nos hace pensar que realmente lo que ha sucedido durante el tiempo en que hemos estado dormidos es que sea precisamente el ser que nos ha inventado el que ha dormido, descansado o simplemente dejado de pensar en nosotros. Y cuando vuelva a pensar en nosotros, entonces nosotros despertaremos y creeremos haber estado durmiendo.

Creo que todo lo expuesto acaba totalmente con el pensamiento filosófico de ese majadero vendedor de porquería pseudointelectual conocido como Descartes. Ea pues, no me queda otra cosa que decir salvo "Descartes, estás descartado". Amén.

4 comentarios:

  1. me gusta tu tono desenfadado y te admiro por decir lo que piensas, como lo sientes, pienso y luego existo...??, entonces si tengo al mente en blanco ( que nunca es el caso), no existo, ¿es mi existencia producto del pensamiento de otro?, ¿si pienso mucho en algo se hara realidad??.
    Descartes , descarta la existencia de un ser superior? , no lo sé, sí se que existe y que estoy aqui, entonces ¿què fue primero, la gallina o el huevo?, yo creo que el pollo, solo para llevar la contraria.
    saludos desde donde termina el mundo
    Condesa_de_mar
    www.lacoladelospoetas.blog.com.es

    ResponderEliminar
  2. Esa teoría ya la había pensado alguna vez, pero en el sentido opuesto: cada uno de nosotros es ese ser y todo gira alrededor de nosotros, es decir, los demas forman parte de nuestro mundo e imaginación y no nosotros somos la imaginación del mundo de alguien....
    Ya lo discutiremos jeje.
    Y nunca me ha convencido el "pienso, luego existo", nadie puede estar seguro de que realmente existamos.

    ResponderEliminar
  3. Pero si todo es fruto de nuestra imaginación, entonces pensamos y por tanto existimos. Sólo si nosotros somos invención de un ente ajeno podemos no pensar y por tanto no existir.

    ResponderEliminar
  4. Tremendo gil Descartes nunca me lo fume. Me acuerdo que cuando lo di en el liceo, la profesora estaba hablando de los argumentos que tenia el para decir que dios existía, y había uno que me parecía absurdo. Y ahí la profesora aclaro que era una época en que era jodido cuestionar la existencia de dios y el tipo la afirmo. Eso lo hace ser menos una mierda? cagón y alcahuete Descartes. Y si tomas de referencia que gran parte de la ciencia se basa en las pelotudeses que dijo, ahí tenes explicadas muchas cosas. Es verdad lo del vino?? jajajaja.

    ResponderEliminar